Un mono bilingüe me hablo y me dijo- welcome back to my jungle – y así me sentí aquí en una selva de edificios, de fieras indomables que me quieren morder. Cierro mis ojos y escucho las congas del monkey bilingüe que me grita libertad, que me libere de esta suerte de soñarte y no encontrarte, de seguir en esta jungla urbana atrapada por los tentáculos caribeños de sol y pocas plantas curativas del alma que abrazan la existencia enmarañada de mi pelo sobre tu rostro, cuando mas te toco .

Monitos hoy vinieron a mí diciéndome que seré la persona más feliz, porque encontraron en mí, la planta necesaria para dejar de estar tan mal y oculta. Monitos en mi cabeza se notan como una manada de estrellas y no puedo hacer nada para cambiarlo, aunque de nada sirve si no tienes amor para darme.

Una mañana gris otro monito vino a mi, con un plan de primavera y fue un sueño enredado en tetas, tan buenas como la banana que devora el monito araña, que pensando que te pegas de mis entrañas, pero no es la joven que mataron, por la estupidez más razonable de mi pueblo, la IGNORANCIA. Eso aquí es como el amor pero más barato y en masas, es un filete para el pueblo, si le crees te duele, si lo vives lo sufres y sí lo matas nada pasa.

Son las 3 A.M. y me siento tan bien que ya estoy down, porque los monos del domingo azul y mi extraña primavera terminaron fumando hierba, en esta vida tan peligrosa, cambiando de colores y de bandera. Cambiando de emoción y hasta de tu favorita ramera, es parecido al amor que es tan sólo una espera, pero demasiado para mí. Solo quiero romperte el cráneo y sacarte la idea de que vivir los sueños es imposible y entrarte, que es mejor dejarse llevar y volar por un mágico sueño de esperaza.

Dándome calambre en el alma hablo con mi mono bilingüe, comentando el deseo mutuo de volver a poner a prueba el relajamiento del estado momentáneo de la mente. Me dijo, que también extraña su cuerpo, sus redondos senos llenos de pelo y sus pezones tipo tetera. Entrando en razón del sexo sádico y malvado así es que nos gusta, no podemos cambiar eso y yo no quiero, porque esta es mi monada, llena de sexo con mucho pelo. Se que nos volveremos a ver envueltos en una monería, porque en una barra llena de copas vi mi futuro esperando lo que no ha de volver.

Esperanza si hay porque en siete años, siete meses, siete copas rotas, sigo siendo la misma gata rodeada de un mono bilingüe y cientos de monitos arañas acariciando mi alma.

Esta es mi monada pintada sobre un óleo abstracto y mojado, acompañándome cada día a ser más oscura.