Que maravillosa es la vida mientras un amante te complazca con esas migajas, que para ti siempre serán suficientes mientras no haya un fruto que frustre tus juegos.
Tanta pasión no te deja vivir y se te va de las manos al saber que no lo puedes contemplar.
Que importan aquellos sentimientos y mucho menos el sufrimiento de tu amada mientras otro cargue con sus necedades y necesidades. Para que llevarte esa vaca entera si su carne da para compartirla y así evitas que se pudra.
El hombre perfecto con la dosis perfecta y esa mente tan abierta mientras de compromiso no sepa.
Son tantos los buenos deseos que no sabría nadie que hacer con ellos, mientras este ella en su casa y él en la suya, un vaciado de vitaminas envenenadas y ella se tome la pastillita PA no salir premiada.
Supongo que lo tengo bien merecido...