Llevar mi vida sin importar cuantas veces me rompí la boca al tropezar, ignorando todos los daños que quisieron hacerme, no sirvió de mucho, pues al final he perdido más.
Camino solitaria para conseguir paz, pero sólo alcanzo perder mi fe y esperanza cada día más. No quedan más que cicatrices de palabras obscenas y una mano que rechaza cualquier deseo. Un alma herida de tanto acribillarla y un corazón con un coma eterno, tan solo recibiendo gotas de sangres anémicas con sabor a hiel.
Todos salen de igual manera sin importar si es justo o culpable, ya no quiero más despedidas, no más dolor, no más decepción. Y me quedare sola como desierto sin ningún amor.
= para mi