Caminas por la cuidad, el sol quemándote la piel en un día mas.

La brisa contaminada de smoke ensuciándote el pelo para ayudarlos a juzgar.

Tu vida actuada entre película y novela con ese soundtrack eterno de lamentos.

Viviendo en esa lucha entre realidad o fantasía, sin saber cual camino tomar.

Una profundidad aparentemente vacía y los piropos de los morenos sudados que construyen lo que te quita la vista al paisaje natural.

Un costo de la vida que ya no podemos comprar ni la canasta familiar y nadie nos asegura que suerte correrá.

No recibimos respuestas aquellos que son borderline, tan solo un cerebro espinoso difícil de tratar.

Pensamientos dispersos que nadie puede agarrar llenan el vacío igual que spam.